Daniel Salas, ministro de Salud de Costa Rica - MINISTERIO DE SALUD DE COSTA RICA


El Gobierno de Costa Rica ha anunciado que a partir del sábado será obligatorio el uso de mascarilla en el transporte público y en espacios cerrados como restaurantes, cines e iglesias, en un intento por contener la expansión de una pandemia de coronavirus que acumula ya más de 2.200 casos en el país centroamericano.

En concreto, según los datos del Ministerio de Salud costarricense, 2.277 personas han contraído el virus, de las cuales 28 permanecen ingresadas en hospitales. Las autoridades mantienen por ahora la cifra de fallecidos en doce, informa el diario 'La Nación'.

El ministro, Daniel Salas, ha sido el encargado de actualizar el balance, en una comparecencia en la que ha confirmado que las mascarillas pasarán de ser recomendables a obligatorias en determinadas circunstancias, principalmente cuando no se pueda guardar la distancia recomendada de 1,8 metros.

Salas ha advertido de que el uso de mascarillas "no es una licencia para romper burbujas sociales" y, por tanto, deben respetarse el resto de reglas de higiene y distanciamiento propuestas en estos últimos meses. "Cada día, con los casos que hemos estado teniendo, nos estamos acercando peligrosamente a la transmisión comunitaria", ha señalado.

Costa Rica había iniciado ya el levantamiento progresivo de las restricciones adoptadas para contener el virus, pero el viernes registró su mayor tasa de contagios (119) desde el inicio del brote. Ante este repunte, el Gobierno ha ordenado paralizar la entrada en la fase tres, que afecta principalmente al comercio.